Me comienzo a secar, frente al sol indestructible.
Arena brillando, engañosos diamantes, como espejos me secan.
Arrastrarme es la solución, arrastrarme a esa sombra lejana, espejismo... alucino.
Es este desierto interior, me seco en mi mismo,
al parecer es el camino, volver al polvo, inerte,
conquistar selvas y montañas, arrastrado por el viento.
Haré más que lo hecho en esta vida desperdiciada, mal desarrollada, esta vida vivida.
Me hago una imagen de lo que hubiese querido,
si lo hubiese logrado, no lo hubiese agradecido,
es que hay que estar muriendo para ver lo que se quiere,
hay que estar secándose para orar al agua, para creer en algo con toda la fe
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